Nuestro programa de lectura
Noviembre | 2010
Cualquier forma de morir
Rafael Menjívar Ochoa
El Salvador
2006
118
01/11/2010
30/11/2010
Enraizada en la tradición de la novela negra, y especialmente en su variante "hard-boiled", escrita a partir de Dashiell Hammet, Cualquier forma de morir nos introduce en un mundo cerrado, brutal, sin compasión. Aunque nunca se mencione el lugar donde transcurre la acción, la novela está claramente ambientada en México, donde el autor vivió casi veinte años. La galería de personajes es variada y encaja perfectamente en ese sistema de corrupción y criminalidad constituido por las mafias del narcotráfico por un lado, y las fuerzas policiales del país por el otro. El espacio concreto fundamental donde se desarrolla gran parte de la acción es una cárcel, en la novela denominada el "Reclusorio". El narrador, del cual nunca se sabe el nombre, es un ex integrante de las fuerzas policiales antinarcóticos y ex jefe de escoltas de un tal "Comandante". La casi totalidad de los personajes carecen de nombre propio (con la curiosa excepción de los cabecillas del narcotráfico local, los hermanos Francisco y Santiago Celis), y son denominados en la novela con apodos tales como el "Sapo", el "Cura", el "Ciego", el "Ronco", el "Coronel", etc.; apelativos que revelan alguna característica física, de carácter o de ubicación jerárquica en este mundo estrictamente normado. A pesar de esta aparente despersonalización, los personajes no se transforman nunca en estereotipos. Menjívar Ochoa, en mucho gracias a su excelente manejo del lenguaje, logra plasmar distintas personalidades con una admirable economía de recursos. Esta es una novela corta pero intensa, sólidamente construida y narrada con destreza, elegancia y humor.